¿Y ahora?

Tenía miedo de perderte,
perdida en ti
y al final nos perdí.
Porque no me quisiste,
pero yo nos quise
por ti y por mi.
Nos quisimos mal y
a destiempo,
buscando un equilibrio imposible.

Me dejaste rota,
y ahora, ¿qué?
Nadie quiere algo roto,
nadie tiene interés en arreglar(me) nada.

Lo entendía todo,
menos a ti.
Una ecuación sin solución,
sin solución como tú y yo.
El más difícil de los problemas,
tú.

¿Y ahora?
¿Quién va a querer un juguete roto?
Acabar al fondo del baúl,
olvidada.
Me olvidaste,
antes me rompiste,
¿y ahora?
¿Quién pegará cada trozo de mí?

Nadie.

Yo era tú,
ahora, no soy nada
ni nadie.

Éramos doce dedos,
que encajaban a la perfección,
pero no existe
ni ella,
ni nuestro nosotros.



Ya no importa(s).
Ya no importo.

¿Y ahora?
Nada.
Vacío(a).